Un día como cualquier otro a Lucy (Scarlett Johansson) su novio Richard le pide que entregue un maletín. La cita será en un hotel donde se debe encontrar con el Sr. Jang, un maniático y excéntrico traficante internacional de drogas.
Lo que Lucy no sabe es que será obligada por un grupo de traficantes a transportar una nueva droga sintética en su estomago, la cual accidentalmente terminará en su torrente sanguíneo disparando todo un cocktail de reacciones con un resultado inesperado.
El ser humano promedio utiliza el 10% de su cerebro. Pero, ¿Qué pasaría si pudiéramos acceder a un 20%, 50% o hasta el 100%? Bien, Lucy, lo averiguará y lo explotará para vengarse de los traficantes que quisieron estafarla.
Esta película está escrita y dirigida por Luc Besson («El Perfecto Asesino«, «El quinto Elemento«) quien dice haber tardado unos 10 años en escribirla, luego de haberse reunido con varios médicos especialistas en este tema.
El guión deja muchos agujeros, presenta acciones innecesarias e inentendibles para el espectador, lo que nos lleva a preguntarnos si realmente esos actos suceden con alguna finalidad o simplemente se trata de un capricho del director.
Durante la cinta podemos ver un despliegue de efectos visuales con una gran calidad y un muy buen aprovechamiento de las tomas sacadas en formato IMAX, la cual cuenta con gran número de tomas estilo documental de la naturaleza en ciertas situaciones, desde bosques y lagunas hasta las profundidades del espacio, de manera como no se ha visto en otras películas.
Podríamos resumir la trama diciendo que la misma resulta similar a una mezcla de «Limitless» (2011) con «Transcendence» (2014), dos grandes películas para ver si es que todavía no lo hicieron.
Calificación: 
Trailer:
Juan Santiago García
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