Con una idea simple y un tanto utilizada, “Marry Me” cumple con los requisitos que se propone. Esta nueva comedia se centra en Annie (Casey Wilson) y Jake (Ken Marino), quienes están en una relación hace seis años y luego de un viaje romántico ella espera que él le pida casamiento, hasta que una pelea innecesaria se las ingenia para arruinar el momento.
Tal como se espera de una comedia romántica, “Marry Me” nos propone ahondar en la relación de Annie y Jake, desde sus comienzos (con el recurso del flashback) hasta el momento de su casamiento. Por eso, mientras que la audiencia lo permita, sabemos que la premisa de la serie tendrá un rumbo al cual seguir y no se estancará solamente en el piloto: los veremos buscar señales que demuestren que tienen que estar juntos, cómo logran afrontar su compromiso, la convivencia y los hábitos de su pareja, entre otras cosas.
Por otro lado, la dupla Wilson-Marino funciona, tienen buena química en pantalla, aunque esperamos que el personaje de Annie baje un poco los decibeles en los primeros capítulos, porque a veces es un tanto difícil poder seguir su ritmo e intensidad, a diferencia de Jake que es más centrado. Los personajes secundarios también ayudan a que la historia fluya.
Los chistes funcionan y generan en el espectador la risa, aunque no en todo momento. Pero además los momentos ridículos también ayudan a generar un contexto entretenido.
Por el momento, la serie creada por David Caspe (“Happy Endings” y que curiosamente se apoya en su reciente casamiento con Casey Wilson) parecería ir por un buen rumbo. Esperemos que los productores puedan continuar generando situaciones divertidas y entretenidas para el espectador, ya que comedias románticas de este tipo no abundan en la televisión y es bueno poder tener un abanico de opciones para todos los gustos.
Mientras que en Estados Unidos ya se estrenó, el 12 de febrero llega a la pantalla latinoamericana de la mano del Canal Sony.
Trailer:
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